El pitcher no te la pondrá fácil,

además conspira junto al catcher

para poncharte

gerentes recibiendo un tìtulo

Cuando llegues al plato, estarás en desventaja numérica. estarás solo contra dos, deberás mantener la calma y la concentración, ser ágil y flexible, pero, sobre todo, deberás estar preparado

La inteligencia colectiva (IC)

La inteligencia colectiva (IC) es pues la capacidad mejorada que surge cuando las personas trabajan juntas aprovechando el caudal de información, perspectivas, ideas, experiencias, comprensión profunda, conocimientos y apreciaciones de un grupo diverso. En la actualidad esa capacidad se apoya también en el uso avanzado de la inteligencia artificial y la digitalización.

De acuerdo con el filósofo Pierre Lévy, quien acuñó el término, la IC se ha convertido en la nueva infraestructura, y explica que:

“…Lejos de fusionar las inteligencias individuales en una especie de magma indistinto, la inteligencia colectiva es un proceso de crecimiento, de diferenciación y de reactivación mutua de las singularidades”.

En América Latina tenemos ingentes talentos individuales, pero de acuerdo con Hausmann nos falta esa “capacidad de juntarnos y colaborar” de manera efectiva en tareas sofisticadas. Es decir, transformar esos talentos en capacidad productiva social; y cuando ésta es débil, no podemos ensamblar el conocimiento necesario para innovar.

Algo que nos hace reflexionar tanto por la urgencia de activar dicha inteligencia como por sus características particulares en la región:

● La diversidad cultural y de conocimientos: que va desde saberes ancestrales hasta el desarrollo tecnológico en el aprovechamiento de los recursos de la biodiversidad, por ejemplo.

● Participación comunitaria y movimientos sociales que han venido evolucionando sensiblemente en las últimas cuatro décadas.

● La suscripción del Acuerdo de Escazú en 2021, un tratado regional pionero sobre democracia ambiental, que busca garantizar el acceso a la información, la participación pública en la toma de decisiones y la protección de derechos humanos en la defensa del ambiente.

La investigación constante sobre el tema, el desarrollo de enfoques propios (inteligencia conectiva, co-inteligencia, inteligencia comunitaria) y las numerosas experiencias dan cuenta de la atención creciente que se está dando a este tema.

Desde 2013, cuando se creó el primer Laboratorio de Innovación Pública en América Latina y el Caribe, hasta ahora, existen más de 30 espacios similares que han contribuido a la formulación de políticas públicas de Gobierno Abierto. Además, se fomenta el intercambio de conocimientos entre ciudades y países para avanzar en su implementación con mayor efectividad.

La Secretaría General Iberoamericana ha creado Laboratorios de Innovación Ciudadana (LABIC) como una metodología para generar soluciones entre la ciudadanía y las instituciones públicas que atiendan a los desafíos más acuciantes de la Agenda 2030 con sus 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODSs). Entre ellos destaca uno de gran complejidad y alcance como es el 12: Producción y Consumo Responsables, y la respuesta global ha sido transitar hacia una economía circular.

La Economía Circular como oportunidad y desafío para la IC

Pasar del modelo de producción extractivo, ineficiente y contaminante hacia otro que nos permita no sólo ser más eficientes, sino generar prosperidad duradera, mientras ahorramos y contribuimos al bienestar integral de la ciudadanía implica una compleja tarea. Es lo que se denomina un cambio sistémico, porque no es un cambio empresarial; exige la implicación de los más diversos actores de la sociedad para idear e implementar soluciones que se adapten a los requerimientos particulares de cada contexto y cultura.

La Economía Circular (EC) es un modelo inspirado en la naturaleza que se basa en diseñar productos y servicios para que no generen desperdicios ni incorporen sustancias tóxicas, alargar la vida de los productos optimizando el uso de los recursos, y revitalizar los ecosistemas desde donde proceden los recursos que transformamos en productos y servicios esenciales para la vida como la regulación climática o la recarga de los acuíferos.

Para lograr aprovechar las oportunidades que nos brinda esta transformación sistémica se requiere innovación en los más diversos ámbitos. Cuando se creó la coalición de América Latina y el Caribe (2021) para impulsar esta transición se decidió comenzar por crear una visión compartida de EC, poniendo de relieve la importancia de los nuevos conocimientos y tecnologías, la visión del mundo y los conocimientos indígenas, así como las experiencias formales e informales de todos los rincones.

La coalición está funcionando como un mecanismo colaborativo entre sector gubernamental, empresas, académicos y sociedad civil en diferentes niveles territoriales, y con el apoyo de organismos internacionales y otras entidades. Esto es crucial para contar con las inversiones, las tecnologías, la educación, y la toma de consciencia entre otros factores esenciales para avanzar.

Es llamativo que, en la evolución de la Agenda Ambiental Internacional, siempre ha estado marcada por una alta participación de la ciudadanía. Desde la Cumbre de Río (1992) las más diversas organizaciones se han movilizado para hacer sentir su voz; y en la declaración resultante se incluyó como principio en la declaración final (Principio 10), conscientes de que constituye un fundamental para el diálogo que conduzca a soluciones integrales. Y ese interés ha evolucionado hasta la suscripción del mencionado Acuerdo como Escazú.

Evidentemente, consagrar el derecho a la participación es esencial, aunque hay varios grados de implicación: ser informado y tener opción de expresar opinión, formar parte del proceso de toma de decisiones o ser incluido en la implementación de las soluciones. Pasar de escuchar opiniones al aprovechamiento de la IC es lo crucial, complejo pero posible como lo muestra la experiencia.

Inteligencia colectiva y Economía Circular: avances y brechas

Uno de los ámbitos en los que más se le ha dado atención en circularidad es a la gestión de residuos y su reciclaje, aunque la EC implique mucho más. En el caso de América Latina y el Caribe esto responde a una necesidad real. Su rápido crecimiento poblacional combinado con un alto porcentaje de generación de residuos, alta concentración de población en las ciudades e infraestructura deficiente ha derivado en una gestión inadecuada de una alta proporción de esos residuos, lo que representa un reto ambiental, ecológico y social.

De allí que una buena parte de los esfuerzos se orientan al diseño de políticas y normativas sobre gestión de los residuos, dotación de infraestructuras, logísticas y programas de formación en separación, reaprovechamiento y disposición final. Acciones en la que vemos involucrados tanto al sector público como al sector privado, ONGs, academia y los propios recolectores de residuos, con su valioso conocimiento de los residuos.

Entre los residuos que más preocupan se encuentran los plásticos y han dado origen a un ejemplo emblemático de inteligencia colectiva y economía circular: el Pacto Chileno de los Plásticos. Lanzada desde 2019, y liderada por el sector público en colaboración con fundaciones británicas. Esta  iniciativa aglutina todos los actores de la cadena de valor con el objetivo de repensar la forma en la que se producen, usan y disponen los plásticos con el objetivo de alargar su vida y no contaminar el ambiente. Entre sus logros destaca haber reducido en más de un 50% los plásticos problemáticos y alcanzar un 75% de reciclabilidad en su portafolio.

El florecimiento de los nodos de innovación a nivel global está demostrando el potencial de la inteligencia colectiva en ese y otros sectores. Los casos que integran saberes, perspectivas y capacidades diversas de la comunidad, así como tecnología, generando soluciones innovadoras e impactos sistémicos positivos son cada vez más inspiradores. Tal es el caso del proyecto de Bioeconomía Regenerativa del Fab Lab Flotante en el Amazonas en Perú. Una iniciativa que fue premiada por la COP16 por dar nueva vida a los bosques depredados.

Evidentemente también existen otros casos que revelan brechas y margen de mejora, poniendo de relieve la necesidad de una mayor y más profunda colaboración y coordinación entre los diferentes actores.

Cómo cosechar el potencial de la inteligencia colectiva.

Investigadores del Centro de Inteligencia Colectiva del MIT han identificado que la IC florece verdaderamente cuando se dan ciertas condiciones esenciales:

● una diversidad cognitiva robusta (diferentes formas de pensar, experiencias, conocimientos),

● independencia de criterio de los participantes,

● descentralización de la información, y

● un mecanismo de agregación eficiente que combine las contribuciones individuales.

La primera de estas condiciones representa un reto al sistema educativo, tanto formal como informal, público y privado. Es esencial repensar la manera como se genera y se comparte el conocimiento, así como la amplitud para integrar distintos tipos de conocimiento. En el caso de la Economía Circular, que se imparte generalmente a nivel de estudios superiores, constituye una ruptura con planteamientos fundamentales impartidos a lo largo del sistema básico y medio de la educación.

Se requieren nuevas formas de pensar. Es diferente la lógica de un modelo lineal en el que introducimos sistemas de gestión y control con miras a disminuir emisiones o aumentar eficiencia, al pensamiento estratégico de largo plazo y con mirada integral, así como la creatividad que se requiere para detectar las oportunidades de introducir la circularidad en función del contexto, sus condiciones o las sinergias que se pueden establecer con otras empresas y/o actores.

En síntesis:

Se ha constatado que el avance hacia la sostenibilidad, y más aún hacia una cultura regenerativa, requiere no sólo conocimiento técnico sino una serie de habilidades esenciales para impulsar propuestas innovadoras para abordar, de manera efectiva e inclusiva, la transformación de la economía y nuestra cultura. No es un tema de empresas solamente; todos los sectores están implicados. Las decisiones sobre adquirir, mantener, descartar un producto o reaprovechar un material dependen también de la ciudadanía. La educación tiene mucho que aportar, e incluso las artes creativas y culturales. Se trata de pensar de otra manera y tomar acciones decididas. Las decisiones que se tomen desde el saber colectivo serán más efectivas y adecuadas a las particularidades de cada caso.

Además, ya no basta con generar menos impactos negativos sino revertir el daño que hemos hecho. La inteligencia colectiva constituye una oportunidad estratégica en la perentoria labor de devolver la vitalidad a las condiciones que soportan la vida, que aportan los recursos y servicios esenciales para nuestro bienestar y el desarrollo de nuestras potencialidades.

Tú también puedes movilizar la IC de tu organización para impulsar el cambio.

En síntesis:

Se ha constatado que el avance hacia la sostenibilidad, y más aún hacia una cultura regenerativa, requiere no sólo conocimiento técnico sino una serie de habilidades esenciales para impulsar propuestas innovadoras para abordar, de manera efectiva e inclusiva, la transformación de la economía y nuestra cultura. No es un tema de empresas solamente; todos los sectores están implicados. Las decisiones sobre adquirir, mantener, descartar un producto o reaprovechar un material dependen también de la ciudadanía. La educación tiene mucho que aportar, e incluso las artes creativas y culturales. Se trata de pensar de otra manera y tomar acciones decididas. Las decisiones que se tomen desde el saber colectivo serán más efectivas y adecuadas a las particularidades de cada caso.

Además, ya no basta con generar menos impactos negativos sino revertir el daño que hemos hecho. La inteligencia colectiva constituye una oportunidad estratégica en la perentoria labor de devolver la vitalidad a las condiciones que soportan la vida, que aportan los recursos y servicios esenciales para nuestro bienestar y el desarrollo de nuestras potencialidades.

Tú también puedes movilizar la IC de tu organización para impulsar el cambio.

DUX ESCUELA DE GOBIERNO –

Sandra Guevara

Integrating life principles into businesses, territories, and leadership. Regenerative stakeholder mapping and management. Teacher, mentor, and international speaker.